Los 3 paisajes por descubrir de las Terres de l’Ebre

En las Terres de l’Ebre hay mucho que visitar. Ermitas, molinos, caminos antiguos y vistas extraordinarias en lugares poco transitados porque son poco conocidos. Un auténtico privilegio si lo miramos desde el punto de vista de la persona que quiere disfrutar de paisajes en calma.
Éstas son las propuestas de EbreXperience:

La Vall de la Foia

Está situada entre las sierras del Montsià y de Godall, cerrada por el norte y abierta a la llanura del Maestrat por el sur. Para más indicaciones, se encuentran las poblaciones de Ulldecona, Les Ventalles y Freginals. Es una zona donde el paisaje contrasta entre los cultivos de olivos y tierras de regadío. Y toda ella está llena de márgenes de piedra seca, casitas de campo y caminos para su paso natural.
La ruta puede empezar exactamente en la puerta de la Oficina de Turismo de Ulldecona. El recorrido requiere un poco de esfuerzo pero la belleza que irá encontrando por el camino lo compensa, así como las vistas al mar al otro lado del Montsià. Tiene algunos tramos complicados para recorrerlos en BTT, pero si se lo toma con calma la puede hacer caminando.
 
Los molinos del río Sénia

Al sur de las Terres de l’Ebre, encontramos este itinerario de tres kilómetros de distancia, de baja dificultad, que permite disfrutar en familia del valor natural e histórico del río Sénia. Uno de los aspectos que demuestran la huella humana es el Molí la Vella, un edificio con más de 900 años de historia, ubicado junto al mismo río Sénia.
De este edificio monumental se tienen referencias desde el siglo XIV, cuando se utilizaba como molino harinero. Posteriormente, se convirtió en una fábrica de papel muy activa. También hospedó una fábrica de hielo y hacia los años 70 cayó en desuso. Pertenece al Ayuntamiento de la Sénia.

Camino de Santiago en el Ebro

¿Sabías que en las Terres de l’Ebre también hay un Camino de Santiago?
Pues sí, en las Terres de l’Ebre también hay caminos históricos de una categoría similar a la del Camino de Santiago que desde la época medieval lleva a los peregrinos hasta los pies de la tumba del santo, en Santiago de Compostela , iniciando la ruta en Roncesvalles y terminándola en Finisterre.
A la salida de Gandesa, siguiendo las señales de los peregrinos, se pasa por la plaza principal siguiendo los símbolos jacobeos que el Ayuntamiento ha colocado en plazas y que descienden hacia la parte más baja del pueblo, donde los ganaderos e industriales tienen sus naves agrícolas.
Siguiendo la carretera que conduce hasta Nonasp se llegará a un punto que obligará a dejar la carretera y emprender un camino que pasará junto a canales y pequeños barrancos, entre campos de cereal, viñedos y pinares. Estos caminos históricos conducirán hasta una masía. Será cuestión de gozar del paisaje.
De hecho, cualquier ruta señalada que pueda hacer, le llevará a moverse entre paisajes que de repente le resultarán mágicos, ya sea en medio de los campos, por los bosques, a los pies de las ermitas o bien al lado del río y de los múltiples canales que irá encontrando.
Verá que hará muchas fotografías y un poco de preparación con respecto al avituallamiento, también le irá muy bien. Ya nos lo sabréis decir.

Anterior
El Parque Natural del Delta del Ebro pone en marcha un nuevo itinerario interpretativo sobre los valores del sosar
Siguiente
Deltebre inicia las primeras Jornadas Gastronómicas del Peix de Bassa