Camarero! Una de langostinos de La Ràpita, por favor!

Seguro que en más de una ocasión habéis oído hablar del chocolate belga, de la leche asturiana, del vino riojano o de las ensaimadas de Mallorca. Y si ha estado de suerte, tal vez haya probado algunos de estos exquisitos productos en alguna ocasión.
Éstos, sólo por mencionar algunos, porque encontraríamos tantos productos como tierras y tradiciones culinarias a todo lo largo y ancho del mundo.

Ahora bien, en pocas comarcas tendrá la inmensa fortuna de poder encontrar de todo: productos del mar y de la montaña, vinos, panes, aceites, frutos secos y jugosos, y un recetario amplísimo que viene de antiguo, para poder disfrutar de una variedad inacabable.
Las Terres de l’Ebre gozan de esta inmensa fortuna. Su gastronomía típica también es una buena motivación para vivir experiencias y realizar una visita larga y frecuentada.

Hasta el 11 de diciembre se añade una motivación extra: las Jornadas del Langostino de la Rápita. Si ya de por sí son un aliciente, el hecho de que los platos de langostino se mariden con vinos de la DO Terra Alta, añade un plus extra que promete convertirse en una experiencia única a la altura de los paladares más finos.

El langostino de La Ràpita: el producto estrella

Producto estrella, muy apreciado en las Terres de l’Ebre y en nuestra casa, es un ingrediente básico de muchas de las elaboraciones del recetario. Aunque es tenido como un manjar de celebración y de domingo, este langostino rapitense no precisa de ninguna excusa especial para probarlo incluso un día de diario.

Este langostino pertenece a la especie Penaeus kerathurus. Tiene una musculatura robusta y coraza exterior brillante, sin manchas negras. Su hábitat se encuentra en aguas poco profundas, especialmente en las desembocaduras de los ríos; por eso hace que se concentre una población importante de este crustáceo cerca de la desembocadura del Ebro. Es de hábitos nocturnos y pasa la mayor parte del día enterrado en la arena. Se pesca con trasmallos y asas, pero también con la técnica del arrastre.

A nivel alimenticio los langostinos, y el marisco en general, son una buena fuente de proteínas de elevado valor biológico. Su contenido en grasa es Bajo y tienen un contenido de colesterol destacable, lo que provoca que las personas que tienen gota deben vigilar la cantidad que comen. También son buena fuente de minerales y vitaminas. Lo podrá encontrar en las pescaderías de las Terres de l’Ebre entre mayo y agosto si es fresco y refrigerado, congelado e incluso cocido, durante todo el año.

Los famosos arroces del Ebro, en cualquiera de sus variantes, a menudo utilizan gambas y langostinos como ingrediente principal, pero son muchísimos los platos que lo contienen.

Una cita imperdible en La Ràpita

El pasado viernes arrancó la edición número 20 de las ya tradicionales Jornadas Gastronómicas del Langostino, en La Ràpita. 9 restaurantes de la población forman parte de estas jornadas y serán los encargados de preparar todo tipo de catas con el producto estrella, el langostino, como protagonista. Los platos se maridarán con los vinos de la Denominación de Origen Terra Alta y todo ello promete ser una experiencia gastronómica de primer orden.

La cocina marinera marida de maravilla con las garnachas blancas de la DO Terra Alta, pero tendrá que ir para dejarse sorprender con las propuestas innovadoras que este año se presentan: bollo con mantequilla de langostino y salsa holandesa, crema de langostino con espuma de patata y trufa, fideos sejados de langostinos y galeras, tartar de langostino con fumete de sus cabezas y aire de yuzu, o langostinos con hilos de kataffi, entre otros muchos.

Ésta es una extraordinaria ocasión para probar este increíble producto de kilómetro 0, el más identitario de La Ràpita.

Los nueve establecimientos rapitenses que ofrecerán menús gastronómicos son Albert Guzmán, Cal Manú, Can Vicent, Casa Ramon Marinés, Freddy caliu familiar, L’Alberg, Llansola 1921, Maria 1941 y Miami Can Pons. Los menús oscilan entre los 37 y 49 euros.