Novedades en la excavación del yacimiento de l’Antic de Amposta

Los arqueólogos descubren una plataforma con funciones sociales y religiosas en el yacimiento de l’Antic de Amposta, que forma parte del sistema defensivo fortificado.

Se trata de la quinta excavación en el yacimiento protohistórico del Antiguo de Amposta, que acabó el viernes con nuevos descubrimientos.

La primera es una gran plataforma pavimentada en la parte más alta del recinto. Es una terraza situada a 170 metros sobre el nivel del mar, construida en la primera edad del hierro (siglos VII-VI antes de nuestra era). Los arqueólogos creen que también funcionó en la segunda edad del hierro y en época ibérica como un espacio social o ritual.

Como ha detallado Samuel Sardà, codirector de la campaña de excavación, también se han dedicado muchos esfuerzos a excavar parte de las fortificaciones. Estas se siguieron el año pasado para tener datos y detalles de cómo era la muralla y qué elementos tenía en sus muros.

La quinta campaña del grupo de investigación GRESEPIA de la URV

Los arqueólogos del grupo de investigación GRESEPIA de la URV han hecho la quinta campaña de excavaciones en el Antic este julio. Después, han confirmado la existencia de una plataforma empedrada de la primera edad de hierro. Es una terraza «singular» al aire libre, que «podría haber tenido funciones de punto de observación y control del territorio» o funciones comunitarias, para reuniones sociales o rituales.

El equipo liderado por el profesor del Departamento de Historia e Historia del Arte de la URV, Samuel Sardà Seuma, y el investigador postdoctoral Marc Prades Painous, ha identificado la plataforma de 150 m2, que en algunos puntos está delimitada por grandes bloques de piedra en vertical.

El hallazgo reafirma «el papel del cerro de l’Antic como un marcador simbólico en el paisaje y como un punto estratégico de control visual del territorio».

A pesar de todo, Sardà ha señalado que el tipo de sector presenta «evidencias y características muy singulares que se salen de lo que es más habitual o común», con este uso social, una nueva aportación a los habituales espacios domésticos, de trabajo, de circulación o elementos de arquitectura defensiva que se han documentado en la Antigüedad.

La excavación de la muralla de l’Antic de Amposta

La campaña del grupo GESPERIA de las últimas dos semanas también se ha centrado en excavar «la imponente y monumental muralla» del recinto, de más de cuarenta metros en el sector 3000. Sobre todo en el flanco norte, «que requería más protección». Se han encontrado muros de entre dos y cuatro metros de ancho y se cree que llegó a tener una altura de más de tres metros.

En la cara interna de la muralla se han empezado a conocer las estructuras de lo que hubiera sido la primera terraza de viviendas, el primer barrio, unos recintos adosados ​​a la cara interna de la fortificación, y una calle o espacio de circulación.

Estos hallazgos proporcionan nuevos conocimientos sobre la importancia estratégica y sociopolítica del asentamiento. «Aún estamos lejos pero hemos avanzado para tener datos precisos sobre cómo era esta muralla, y empezar a intuir ya conocer algunos elementos importantes de este paramento murario que era un importante elemento defensivo del poblado y una plataforma de contención por el gran desnivel de la colina» , ha dicho Sardà.

Nuevas hipótesis arqueológicas

Se trabaja con la hipótesis de que la construcción inicial de la muralla podría corresponder al mismo proyecto de edificación del poblado ibérico de unos 2000 m2, sobre el siglo V anE. Aunque no se puede descartar un origen anterior. La configuración estructural correspondería al sistema defensivo del poblado durante los siglos III y II año, una etapa especialmente conflictiva de la protohistoria ebrense.

De cara a la próxima campaña está previsto desdoblar al equipo. Suelen formar una quincena de personas, la mayoría estudiantes, para trabajar en el sector 2000, el barrio de pescadores, y seguir avanzando con las excavaciones de la muralla. En el barrio de pescadores existen dos ámbitos excavados. Este año sólo se han realizado tareas para recoger muestras en dos chimeneas durante los trabajos de este mes de julio. El grupo prevé completar de nuevo la excavación de los ámbitos pendientes.

Nuevos proyectos sobre el paleoDelta

Durante esta campaña, GRESEPIA-URV ha recibido la resolución favorable de dos importantes proyectos. Uno es ‘Análisis de útiles y restos bioarqueológicos vinculados a la pesca en el curso inferior del Ebro durante la Protohistoria’, que les ha concedido la Fundación Palarq, y el otro es el proyecto I+D+i ‘Modelos de ‘ocupación territorial y paisaje en la desembocadura del Ebro (I Milenio ANE)’ (PALEODELTA). En colaboración con el doctor Carlos Ibáñez del Centro en Resiliencia Climática-Eurecat e investigadores del Instituto Catalán de Arqueología Clásica (ICAC).

PALEODELTA se centrará durante cuatro años en estudiar la evolución del delta del Ebro en el primer milenio antes de Cristo, la época protohistórica. Se harán sondeos dentro del espacio deltaico para verificar la hipótesis de Carlos Ibáñez y otros investigadores, sobre la existencia de un delta hacia el sur, en aquella época.

«Es muy importante para nosotros porque, de alguna manera, el poblamiento de época protohistórica entendemos claramente que debe obedecer en parte, debe entenderse o explicarse de acuerdo a cómo era el paleopaisaje de la época. La posibilidad de establecer esta interacción es clave», ha remarcado Samuel Sardà. Este proyecto empezará a principios del próximo año.

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